¿POR QUÉ INICIAR UN TRATAMIENTO?
Una persona decide iniciar un tratamiento psicoanalítico por múltiples razones. Entre las más habituales, tenemos el estar embrollados en sufrimiento y dolor, el padecimiento de ciertas inhibiciones, postergaciones, y los (des)encuentros amorosos.
Ya sea en el discurrir del día a día, en el trabajo, con la familia, en el amor, emergen preguntas que uno mismo no sabe dar respuesta. «Algo no va bien en mi vida y no sé qué es, algo no encaja, siempre repito los mismos errores, me pasa algo y no sé por qué, no soy capaz de superar una pérdida, no consigo salir adelante, no sé lo que quiero, qué debo hacer? Tengo ansiedad, estrés, insomnio, me siento triste.»
En cuanto a lo corporal, también puede haber diversos síntomas, como esa sensación que atenaza el estómago, la Ansiedad que no cesa, la angustia, las Inhibiciones en el campo de la sexualidad o la aparición de ciertas dificultades con la alimentación que invaden el pensamiento y ponen en peligro la vida.
Una persona decide iniciar un tratamiento psicoanalítico por múltiples razones. Entre las más habituales, tenemos el estar embrollados en sufrimiento y dolor, el padecimiento de ciertas inhibiciones, postergaciones, y los (des)encuentros amorosos.
Ya sea en el discurrir del día a día, en el trabajo, con la familia, en el amor, emergen preguntas que uno mismo no sabe dar respuesta. «Algo no va bien en mi vida y no sé qué es, algo no encaja, siempre repito los mismos errores, me pasa algo y no sé por qué, no soy capaz de superar una pérdida, no consigo salir adelante, no sé lo que quiero, qué debo hacer? Tengo ansiedad, estrés, insomnio, me siento triste.»
En cuanto a lo corporal, también puede haber diversos síntomas, como esa sensación que atenaza el estómago, la Ansiedad que no cesa, la angustia, las Inhibiciones en el campo de la sexualidad o la aparición de ciertas dificultades con la alimentación que invaden el pensamiento y ponen en peligro la vida.